Las inversiones financieras, también conocidas como inversiones de cartera, son aquellos recursos que van adquiriendo un mayor valor con el paso del tiempo dependiendo su relación con el mercado financiero. Existe una gran variedad de inversiones que una persona puede realizar, por lo cual, vamos a mencionar algunas de las más conocidas:
Inversiones de renta fija
La inversión de renta fija es aquella que se enfoca en la preservación del capital y los ingresos por encima de la rentabilidad potencial. Por lo cual, aunque es casi imposible perder tu capital en este tipo de inversiones, el retorno que obtendrás será bastante reducido en comparación a otro tipo de inversiones. Otra de sus características son sus intereses, los cuales pueden estar referenciados a algún indicador o pueden ser fijos desde la emisión del proceso hasta su fecha de vencimiento.
Inversiones de renta variable
Totalmente opuesto a las inversiones de renta fija, las inversiones de renta variable son las que poseen uno de los mayores grados de riesgos, por lo que la rentabilidad, y hasta la posibilidad de recuperar el capital invertido, son bastante lejanas. Aunque estás dejan una excelente devolución en caso de que la inversión sea exitosa. La razón detrás de esta inestabilidad radica en la forma en que las operaciones de la inversión dependen de distintos factores para funcionar, como el capital que le invierten, el estado del mercado en ese momento, etc.
Inversión en bolsa de valores
Como su nombre lo indica, invertir en la bolsa de valores significa realizar un proceso de compra y venta en las acciones e instrumentos financieros disponibles en el mercado de valores. Esto con el fin de apoyar en el financiamiento de las pymes y empresas en crisis, recibiendo regalías por lo invertido en ellos, debido a su estilo de financiamiento, esta se ha convertido en una de las inversiones favoritas de los principiantes para empezar a familiarizarse con la industria.
Inversión en divisas
Actualmente, la inversión de divisas es una de las formas de inversión más populares y usadas en todo el mundo debido a su gran liquidez, velocidad de operaciones, y accesibilidad para todo público, siendo otra opción predilecta para los menos experimentados. Esta consiste en la compra de ciertas monedas de carácter internacional, mayoritariamente dólares o euros, y guardar por un cierto tiempo hasta que surja una subida en el mercado y venderlas a un precio mayor, obteniendo ganancias en la diferencia de compra.
Inversión en materias primas
La inversión de materias primas consiste, precisamente, en la compra y venta de materiales provenientes de la naturaleza y productos brutos, como pueden ser metales preciosos, que luego se reutilizan para la construcción de nuevos productos por los que se venden por un precio mayor. Aunque esta inversión puede ser más tardada, resulta mucho más completa al no tener altos indices de riesgos, a cambio de excelentes regalías monetarias.
Inversión en bienes inmobiliarios
Desde hace varios años, la inversión en bienes inmobiliarios se ha convertido en una de las más empleadas por el público promemdio. Esta consiste en el alquiler de propiedades a terceras personas para obtener una ganancia por el alquiler, según el tiempo que fijes. Eso sí, en este tipo de inversiones requiere de una mayor dedicación que el resto de opciones, pues, se debe estar al pendiente de mantener en buen estado la propiedad para recibir el correspondiente pago.